Como capital de Bohemia, Praga ama la música clásica. Aquí Mozart estrenó su ópera Don Giovanni, nos contó el guía Zach, y recibió una ovación del público en pie durante 30 minutos. Luego regresó a Viena y no le hicieron demasiado caso. He podido asistir a dos conciertos de música clásica durante mi estancia aquí, el segundo bastante sorprendente. Cuarenta kilómetros al norte de Praga nació Antonin Dvórak (la única palabra checa que sabía pronunciar hasta el momento, se pronuncia dvórsak) y aquí dirigió a la Orquesta Filarmónica Checa el día de la inauguración de su sede, el Rudolfinum, en 1896. Aquí podéis escuchar la Sinfonía del Nuevo Mundo que la Orquesta Filarmónica de Nueva York encargó a Dvórak en 1893. He tenido la oportunidad de escuchar un concierto de música de cámara ahí, en el Dvořák Hall, del Cuarteto Calidore , de la Sociedad de Música de Cámara Checa, con el siguiente programa: Wynton Marsalis: At the Octoroon Balls / Bedřich Smetana : String Quartet ...